
Escritura colaborativa
P'epis Tu Mirada Cuenta
Desde hace unos cursos nos presentamos al concurso "P'epis: Tu mirada cuenta", organizado por el ICASST (Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo), en la categoría de Relato. Cada clase debe presentar un relato construido de manera colaborativa sobre algún aspecto relacionado con la prevención de riesgos laborales, que debe tener una extensión maja (entre 2000 y 4000 palabras) y una moraleja final.
En principio, se trata de un tema poco atractivo pero nos sirve para trabajar varios aspectos:
- Iniciar a nuestro alumnado en la necesidad de prevenir riesgos laborales. Esto conlleva explicar lo que es un riesgo laboral, posibles riesgos laborales que existen, la importancia de prevenir problemas de salud que puedan darse en cada trabajo y este tipo de cuestiones que ignoran porque aún no se han iniciado en lo laboral.
- Aprender a escribir relatos de forma colaborativa, lo que supone llegar a acuerdos entre todos, que no es fácil pero tampoco imposible.
¿Cómo lo planteamos?
Primero explicamos brevemente el concurso, sus categorías y requisitos. Explicamos todas las categorías por si algún alumno, especialmente motivado quisiera presentarse a todas, pero nos centramos en la nuestra, la del relato. Insistimos en que hay premio para cada alumno de clase y en que todas las ideas son bienvenidas, porque lo que a uno le puede parecer que no está muy allá, otro puede aportar algo que haga de ello una gran idea.
Comenzamos explicando nociones básicas sobre posibles riesgos laborales y rápidamente les mostramos un posible esquema narrativo con dos opciones. Tras una pequeña puesta en común, se les da cinco minutos para pensar en un posible personaje. Lo piensan por parejas.
Comienza entonces una lluvia de ideas, donde cada pareja plantea un posible protagonista (algunos incluso desarrollan toda la trama). Se escriben en la pizarra los posibles candidatos y se elige a un protagonista (si no se ponen de acuerdo, se vota y se asume la elección de la mayoría). Muchas veces, en la elección final del personaje, se combinan varios aspectos atribuidos a otros personajes desechados. Se enriquece, así, nuestra idea inicial.
Una vez elegido el personaje, se construye la trama del relato, basada en el esquema. Se elige opción (la 1 es más fácil que la 2) y se determina lo que pasa en cada parte. Se va escribiendo en la pizarra dicho esquema.
Terminado este, se reparte la escritura. Por parejas tendrán que ocuparse de una escena del relato, escribiendo veinte líneas cada pareja como mínimo.
Por ejemplo:
- Pareja 1: Presentación del protagonista (cómo es, qué hace, rutinas diarias).
- Pareja 2: Descripción del trabajo, de los posibles riesgos laborales.
- Pareja 3: El protagonista descubre un nuevo riesgo laboral. Decide poner en aviso a sus compañeros.
- Pareja 4: Sus compañeros le piden que lo hable con el jefe. Presentación del jefe (negativa).
- Pareja 5: Conversación con el jefe. No consigue nada.
- Pareja 6: El protagonista inicia un plan para que el jefe se convenza de ese nuevo riesgo.
- Pareja 7: Plan (por ejemplo, simular un accidente laboral ocasionado por ese riesgo para que el jefe se asuste).
- Pareja 8: Puesta en marcha del plan. Sale mal, porque el jefe se lo cree y le empieza a dar un ataque de ansiedad.
- Pareja 9: Todos creen que les van a despedir pero el jefe recapacita y pone las medidas oportunas para evitar ese riesgo. Deciden moraleja final.
- Pareja 10: Diseña portada, deciden título y seudónimo, y revisan el texto (para eliminar incoherencias y crear un hilo conductor).
Después de la redacción, para la cual se dejan dos sesiones (algunos en una ya lo tienen), se pone en común el proyecto final. Cuando esté el texto acabado, se lo pasamos a todos y quedamos un día para hacer la tertulia de su propio relato.
Se leen el texto en casa y en la tertulia cada uno señala una parte que les haya llamado la atención, explicando por qué. En esta actividad se suelen sorprender que el resultado final es bastante mejor de lo esperado, además de advertir los errores y aciertos en las decisiones narrativas. Se aprende así cómo se escribe un buen relato y lo importante que es la coordinación en el equipo para llegar a un buen resultado. Conseguir una historia coherente escrita por tantas manos es un trabajo en equipo donde cada línea cuenta y es en esta reflexión conjunta donde nos percatamos de ello.
Todo el proceso junto con las reflexiones realizadas se reflejarán en la memoria que piden junto al relato. En este documento señalamos el aprendizaje que esta actividad supone para los alumnos en materia de riesgos laborales, pero sobre todo resaltamos que contribuye a desarrollar su creatividad en la escritura y su habilidad para trabajar en equipo en un proyecto que engloba a unas 20-25 personas.
Es una actividad que hacemos con todos los cursos (ESO y Bachillerato) más por el aprendizaje que supone en cada grupo que por aumentar las opciones de ser premiados. Sabemos que los cursos bajos (1º-2ºESO) apenas tienen opciones de conseguirlo al competir con los cursos altos (3º-4ºESO) de la misma categoría, la de la ESO (en la de Bachillerato apenas hay diferencias de este tipo entre los de 1º y los de 2º). En la escritura de un alumno de 4ºESO hay un grado de madurez (en temática, vocabulario, estructuras sintácticas, etc.) que difícilmente puede ser superado por alumnos de 1ºESO. Sin embargo, lo trabajamos también con los pequeños de Secundaria porque aprenden a escribir relatos en equipo y a reflexionar después sobre ello.
Si, además, luego nos llevamos algún premio, nos llevamos una alegría al final de curso, que siempre viene bien. Además, es una excusa maravillosa para crear un discurso (hacer una autoevaluación y expresar nuestra satisfacción ante el trabajo bien hecho), dominar el pánico escénico y decirlo alto y claro delante de un público.
Dejamos vídeo con ejemplo: